El Señor Jesús ejerció su ministerio en los hogares, prueba de ello es el caso de Mateo, quien se convierte al Señor y luego Jesús hace una reunión en su casa e invitan a los amigos de Mateo. Podemos afirmar que Jesús estableció una célula en casa de Mateo; y allí había tres tipos de personas: el Líder: Jesús; los colaboradores: los discípulos; y los amigos invitados: publicanos y pecadores. (Mt. 9:9-13).
También los apóstoles trabajaron en células, en la primera predicación de Pedro se convirtieron tres mil personas y no había templo para albergar tal multitud la única manera era reunirlos en los hogares: “y partiendo el pan en las casas, comían juntos con alegría y sencillez de corazón” (Hech. 2:47; 5:42).
Es un grupo pequeño integrado por personas que se reúnen en un lugar previamente establecido, una vez por semana, con el propósito de alcanzar almas para Cristo y desarrollar en ellos un crecimiento integral centrado en la palabra de Dios.
¿Quiénes integran la célula?
¿Qué se debe predicar?
Jesús nos mandó a: Bendecir a las personas, Ayudarle en sus problemas, Sanar y liberar a las personas. El mundo está buscando lugares donde encontrar bendición de Dios, y para eso son las células o grupos de alcance. Las normas serían; Coordinar bien el tiempo de reunión, No ser contencioso, ni discutir sobre temas doctrinales, Buscar apoyo en sus líderes en cuanto a consejería.
Programa de reunión celular: